La fuerza de gravedad del planeta Tierra mantiene a la Luna en órbita alrededor de él. A su vez, la luna, con su fuerza, modifica los sistemas terrestres. De este modo, gozamos de la variabilidad climática de las cuatro estaciones del año. Otro efecto más conocido es el de las mareas. Es tan poderosa la influencia de la luna, que mueve, literalmente, las gigantescas masas de agua oceánicas a diario. Es interesante notar esto: Los cuerpos líquidos son compelidos a moverse, atraídos o repelidos por el satélite… ¡y nuestro cuerpo físico está constituido mayormente por agua! La menstruación, los humores femeninos tan cambiantes, las manifestaciones emocionales… ¡tanto de nosotras “regulado” por la Luna! Sería interesante observarnos a nosotras mismas en nuestras actitudes a lo largo de un mes lunar, y luego compararlas con las del mes siguiente. Curiosamente, probablemente, descubramos algunos “patrones de conducta” similares, mes tras mes… Comienzo de las fases de este mes: 4 de marzo....
